AGENCIA PORTÁTIL
Tamaulipas, 9 de marzo.- Más de 10 mil niñas y adolescentes en Tamaulipas se encontraban laborando al levantarse la Última Encuesta Nacional de Trabajo Infantil, según el Inegi.
Se trata de menores de cinco a diecisiete años de edad, y aunque en número las mujeres son rebasadas por los hombres, las condiciones para ellas son más desfavorables.
Sumaron 10 mil 466 niñas y adolescentes en esa condición, contra 30 mil 341 hombres en el mismo grupo de edad. En el primer caso representaron el 2.4 por ciento respecto a la población total en ese rango y en los varones fue el 7.1%.
El trabajo infantil priva a los menores de su niñez, su potencial y su dignidad, y es perjudicial para su desarrollo físico y psicológico. En ocasiones llega a ser peligroso.
El psicólogo Ricardo Flores señala que tiene efectos muy adversos porque priva a los menores de asistir a clases, ellos se ven obligados a abandonar la escuela en la mayoría de las veces contra su voluntad y de forma prematura, o tienen que combinar los estudios con el trabajo, lo que hasta para los adultos es sumamente complicado y con razón para la niñez y la adolescencia.
Lo que marca la ley…
La Ley Federal del Trabajo (LFT) prohíbe que laboren menores de 15 años y lo permite a los adolescentes de 15 a 17 años que hayan terminado su educación básica obligatoria.
Sin embargo, esta misma ley prohíbe el trabajo de los menores de 18 años en actividades que pongan en riesgo su desarrollo y salud tanto física como mental y muchos lo hacen clandestinamente debido a su necesidad económica.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) establece que los servicios domésticos no remunerados peligrosos realizados por menores también se consideran trabajo infantil.
Las tareas domésticas de carácter peligroso son aquellas en que las niñas se exponen a cargar cosas pesadas, dolores de espalda o musculares, cansancio o agotamiento, problemas respiratorios o intoxicación y que no permiten cumplir con las actividades escolares.
