Agencia Portátil
José Saldaña
Cd. Victoria, 17 de septiembre de 2025.- Meteorología Tamaulipas recordó este martes uno de los fenómenos más devastadores que han azotado el Atlántico: el huracán Gilbert, considerado un ciclón mítico por su fuerza y magnitud.
El 17 de septiembre de 1988, Gilbert impactó al norte de La Pesca, en Soto La Marina, como huracán categoría 3, dejando a su paso una estela de destrucción en comunidades costeras de Tamaulipas.
En su máxima intensidad, alcanzada sobre el Mar Caribe, este sistema se elevó a categoría 5, con vientos sostenidos de 295 kilómetros por hora y rachas que llegaron hasta los 360 km/h, una de las marcas más altas registradas en la historia.
De acuerdo con los registros meteorológicos, Gilbert fue en su momento el huracán más intenso del Atlántico y actualmente se mantiene como el segundo más fuerte, solo por debajo del huracán Wilma, que azotó en 2005.
El ciclón cobró notoriedad internacional por la rapidez con la que se intensificó y por el área de afectación, que incluyó el Caribe, la Península de Yucatán y el noreste de México.
En Tamaulipas, el impacto fue particularmente severo en la zona costera, donde los fuertes vientos y las marejadas destruyeron viviendas, infraestructura pesquera y agrícola, además de obligar a miles de familias a evacuar.
A más de tres décadas de distancia, Gilbert sigue siendo un referente obligado cada temporada de huracanes, recordando la vulnerabilidad de la región y la importancia de la prevención y la cultura de protección civil.
Hoy, con tecnología satelital más avanzada, alertas tempranas más precisas y protocolos de emergencia más consolidados, la preparación ante huracanes en Tamaulipas ha mejorado notablemente; sin embargo, Gilbert permanece como un recordatorio de que ningún sistema es infalible frente a la fuerza de la naturaleza.