Agencia Portátil/ 26 de enero
Un grupo de gorilas del Safari Park del zoológico de San Diego, en el estado de California, se está recuperando de un brote de COVID-19 que enfermó a algunos de los ocho integrantes de la manada, dijo la institución en un comunicado de prensa difundido el lunes.
Los gorilas comenzaron a enfermarse el 6 de enero, cuando dos de ellos comenzaron a toser, según el informe del San Diego Zoo Global. Las pruebas de materia fecal realizadas el 11 de enero mostraron que un número desconocido estaba infectado con el virus que causa el COVID-19, probablemente contraído tras su exposición a un empleado del zoo que estaba infectado pero era asintomático.
El contagio se produjo a pesar de que se siguen todas las precauciones recomendadas, incluidos los protocolos de seguridad de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC) y la Salud Pública del Condado de San Diego, y se usan equipos de protección personal (EPP) cerca de los animales.
“Durante casi un año, los miembros de nuestro equipo han estado trabajando incansablemente, con la máxima determinación para proteger a los demás y a la vida silvestre bajo nuestro cuidado de este virus altamente contagioso”, explicó Lisa Peterson, directora ejecutiva del San Diego Zoo Safari Park. “La seguridad de nuestro personal y la vida silvestre bajo nuestro cuidado sigue siendo nuestra prioridad número uno”, añadió.
La cepa que los infectó fue “una nueva cepa altamente contagiosa del coronavirus, identificada recientemente en California”, dijo el zoológico. Después del diagnóstico, los gorilas fueron puestos en cuarentena juntos en el parque.